El Detector Especial BDH160 esta diseñado con tecnología transreflectante y un cabezal motorizado que permite alinear automáticamente el haz de detección, ajustando continuamente su posición para mantener una precisión óptima, incluso ante movimientos estructurales del edificio. La detección de humo se realiza mediante el análisis del haz infrarrojo reflejado por un reflector, lo que permite identificar posibles focos de incendio con alta fiabilidad.

El dispositivo incluye una unidad de control que facilita la configuración, alineación (automática o manual), mantenimiento y diagnóstico del sistema. También permite ajustar la sensibilidad del detector y realizar pruebas para verificar el correcto funcionamiento de la alarma, tanto en el propio equipo como en el panel de control. Su versión estándar cubre distancias de 7 a 70 metros, y puede extenderse hasta 160 metros mediante kits de ampliación, lo que lo hace ideal para edificios de gran tamaño.